Nosotras tenemos viajando por el mundo más de 17 años  y hemos desarrollado una lista que nos permite optimizar el tiempo y evitar que nada esencial sea dejado al azar.

Esto es muy importante a la hora de ir a países de los que apenas sabemos nada. Incluso países que nos son “familiares” como los países europeos o americanos pueden sorprendernos con algún requisito o asunto idiosincrásico.

Aunque una nunca puede cubrir todos los escenarios posibles que se puedan dar al salir de viaje, el contar con una lista previa y sancionada por la experiencia nos ha resultado de inmenso valor.

Hoy queremos compartirla con ustedes nuestro checklist.

 

Averigua todo lo que puedas sobre tu destino

 

  • Leer a tu blogger favorito si éste ha estado en tu lugar de destino. Incluso, escribirle si tienes una pegunta más específica.
  • En general, guías online como Lonely Planet dan buena información, pero en las ediciones impresas esta puede estar un poco desactualizada. Además somos mucho más ecofriendly si no imprimimos el papel.
  • Para evitar sorpresas en la aduana, averigua todo lo que puedas en los sitios webs del gobierno del país de destino asuntos como necesidad de visa para entrar, vacunas requeridas, fiebre amarilla, requisitos especiales, tiempos de permanencia como turista, etcétera.

  • Haz una investigación sobre la situación política, disturbios, conflictos o eventos naturales que puedan estar ocurriendo en el país. A unos amigos de viaje por Europa Central en 2002 les ocurrió que, estando en Berlín, preparaban con emoción su viaje a Praga. Al llegar a la agencia de viajes para comprar los boletos a Praga, la empleada les dijo “Are you sure?” mientras señalaba un diario donde se veían trenes bajo el agua. ¡Estos amigos estaban en medio de las inundaciones de Europa Central en 2002 y no se habían percatado!
  • Empápate de la cultura y leyes de tu destino. Puede ahorrarte muchos inconvenientes y situaciones embarazosas. En Singapur, te multan por mascar chicle con 1000 dólares (No, no es broma) o si te besas en público.
  • Asegúrate de que tu licencia de conducir internacional sea válida en tu destino, si deseas rentar un vehículo. Es mejor si rentas con anticipación antes de viajar.

 

Asuntos de dinero

 

  • Investiga si el banco que te otorgó tus tarjetas de crédito te cobrará comisiones extras por usarlas en el extranjero. Muchas veces ocurre que si, por ejemplo, usamos nuestra tarjeta de crédito expedida en Montreal en el extranjero debemos pagar doble comisión: la de nuestro banco en Montreal y la del banco del comercio en el país de destino. Algunos bancos otorgan tarjetas de crédito sólo para viajes. Investiga si tu banco ofrece ese servicio.

  • Suspende mientras estés de viaje el servicio de roaming del celular. El hacer una llamada telefónica e incluso, si te envían un mensaje de texto, puede resultarte muy caro. Si vas a permanecer más de dos semanas recomendamos comprar tarjeta SIM para estar comunicado. Si es menos de dos semanas, en los hostales, Airbnb, lugares públicos o franquicias como McDonald siempre hay wifi gratuito.
  • Trata de cambiar divisas del país de destino antes de viajar. Si necesitas cambiar dinero ya estando en el país destino, dirígete mejor a una casa de cambio y no a los bancos, las comisiones son muy altas y perderías dinero, por otra parte, evita a toda costa cambiar en los aeropuertos.
  • Infórmate sobre las opciones de tarjetas de transporte y de entradas a sitios turísticos. Si tu objetivo es visitar “todos” los museos, hay tarjetas tickets de entradas con precios especiales para visitar una lista de museos. También puede haber tarjetas especiales para el transporte: metro, tren o buses. Si puedes comunicarte, pregunta directamente con el empleado del metro.

 

Qué llevar

 

  • Productos de higiene personal. Puedes ahorrar si los compras en casa. En países económicos como Tailandia podrías comprarlos allá. Pero pueden no ser de la calidad o variedad a la que estás acostumbrado. O puedes no encontrarlos. En Shanghai, Hong Kong, y Beijing por ejemplo y aun siendo grandes urbes, nos fue imposible encontrar hilo dental y desodorante. Nosotras con el asunto de la higiene somos un poco picky y preferimos llevarnos nuestros productos.
  • Lleva un koala o belt bag para lo esencial. Hay modelos planos ideales para llevar dentro del pantalón.
  • Considera llevar sólo lo que vayas a usar. En nuestro caso, si no vamos a usar los pasaportes para rentar bicicletas por ejemplo, los dejamos bajo llave en las maletas en nuestra habitación.
  • Crema o gel antibacterial. Muy importante con tanto virus pululando por el mundo.
  • Bolígrafo. Es increíble lo mucho que necesitarás de un humilde bolígrafo. Y es mejor no pasar por el momento incómodo de pedírselo a un extraño. Porque vas a tener que llenar fastidiosos formularios casi sin excepción.
  • Algo de sentido común, llevar ropa adecuada según la estación que haya en el país de destino. Ten en cuenta que no es lo mismo un invierno en Moscú que al norte de España, por ejemplo.
  • Lleva crema de cacao para los labios. En invierno o verano debes protegerte del sol.
  • Cargador portátil para el celular. Cuesta unos 30 $. Te ahorra mucho tiempo: Buscar un lugar para cargar el portátil. Luego esperar a que éste se cargue… Sobre todo en invierno, que el celular se descarga mucho más rápido que en verano.
  • Si eres como nosotras, adicto al café, lleva una pequeña cafetera tipo greca. Un paquete de medio kilo de café te puede costar 3 dólares y puede durarte dos o tres semanas. En una cafetería un café puede costarte 2 o más dólares.
  • Si te gusta cocinar, lleva envases de Tupperwares, salero, azucarera y una botellita de aceite. Puedes llevar cubiertos plásticos. O puedes llevar esos cubiertos multifuncionales (cuchara por un lado tenedor por el otro).
  • Una navaja suiza, para abrir latas, envases. Además de otras funciones como cortaúñas, tijera, navaja y un sinfín de cosas más en una presentación compacta. Hay cantidad de modelos que pueden cumplir tus necesidades. Revisa el sitio de Victorinox.

 

Conclusión

La práctica constante de estas recomendaciones hará que las vayas optimizando a tus exactas necesidades y la adaptación a tus distintos destinos se te hará más fácil.

Lo ideal es que estas preparaciones previas se te vayan haciendo una segunda naturaleza. De este modo evitarás esa horrible sensación de que olvidaste algo en casa o no hiciste el trámite que debiste haber hecho o, simplemente, te encuentres con un obstáculo que reste disfrute y tiempo a tu viaje y que pudiste haber evitado fácilmente con un poco de previsión.

Pero ante todo, nos falta la principal herramienta sin la cual ningún viajero debería salir: el sentido común.

Siempre valora todas las situaciones usando el sentido común. Eso, y estas sencillas recomendaciones harán de tu viaje una verdadera aventura de disfrute y aprendizaje.

 

”Viajamos no para escapar de la vida, sino para que la vida no escape de nosotros.”

                                                                                                                           – Anónimo.